Editorial

Como en cada año que comienza, los propósitos de mejorar al que acabamos de despedir se multiplican en las primeras anotaciones del flamante calendario. El transcurso de los sucesos que nos depare, entre los que se cuentan los nimios y los trascendentes, nos llevará a un nuevo balance con el que se cerrará el ciclo de cada doce meses.

También habremos de afrontar nuevas pruebas, nuevos retos, algunos de los cuales quizá ahora ni siquiera hayan asomado. Una vez apagadas las luces navideñas, cuando nos quedamos con la escasa que proporciona el invierno, mezclamos la incertidumbre con la esperanza ante lo que está por venir.

Contribuyendo al espíritu de renovación, Ars Creatio estrena página electrónica, con la que agilizaremos el contacto con nuestros seguidores (lectores, participantes en concursos o asistentes como público). Aunque lo importante siempre es el contenido, y ése nos lo proporcionan nuestros amables colaboradores, un continente agradable y mejor acondicionado también ayuda a la difusión de la cultura.

Feliz 2024.