(Para mi abuelo Miguel)

Me siento a tu lado
y me cuentas historias
de antes, de cuando eras pequeño,
me hablas de mis antepasados
y yo te escucho
con una sonrisa
en los labios.

Eres un libro hablado
las palabras están grabadas
en tu memoria,
recuerdas cuentos o relatos
y hablas con pasión,
el mundo entero
cabe en tus manos.

Eres para mí un mago
porque sabes hacer magia
con los acentos de tu voz llena
de experiencias positivas y obstáculos,
fuiste y aún eres feliz
a pesar de los momentos difíciles
y algunos tragos amargos.

Ahora que sé quién eres
y conozco tu historia
puedo sentir la luz de tus palabras,
esas flores con olor a campo
que hoy crecen
en el jarrón de mi curiosidad
junto a la arena de tus años.