Revista Cultural Digital
ISSN: 1885-4524
Número
23 – Verano 2011
Asociación Cultural Ars Creatio – Torrevieja

Como habrán podido ver, en todos los carteles y en algunas páginas de nuestra asociación aparece una etiqueta (código de puntos). Esto es lo que se denomina etiquetas o códigos “QR”. Explicaremos su utilidad, que pienso que es mucha.
Hay que introducirse en estas nuevas tecnologías, aunque nos cueste; es evidente que no tendremos más remedio, así que empecemos ya.
Código QR (Quick Response Barcode)
Hasta ahora estamos acostumbrados a los famosos códigos de barras, los que llevan los productos que compramos en los supermercados, que son unidimensionales. Por lo general, necesariamente debemos ir a una base de datos (cada centro comercial o empresa tiene la suya) a consultar ese código lineal o de una dimensión. Pero con los códigos QR, o de dos dimensiones, podemos almacenar en ellos directamente información sin pasar por una bases de datos ni conexión a Internet, con la ventaja que la información está siempre visible y no dependemos de otros ordenadores o servidores. Veamos cómo funciona esto.
En 1994 una compañía japonesa, Denso-Wave patentó el código QR, usado generalmente para componentes de automoción, en etiquetas adhesivas que se pegaban en zonas donde con un escáner de mano fuesen accesibles. También, las ”micro QR “que se pintaron en chips electrónicos para la fabricación de placas de ordenadores y electrónica en general, fueron las pioneras. Debemos tener en cuenta que la compañía japonesa no ejerce sus derechos sobre las patentes de los códigos, por lo que es de código abierto.
El estándar internacional para la generación de estos códigos es el ISO/IEC18004, revisado en 2006 (se puede adquirir en ISO). Si alguien desea el borrador ISO/IEC18004 , se lo podremos facilitar.
Podemos guardar información en estos códigos bidimensionales de más de 7000 caracteres numéricos, más de 4000 alfanuméricos, por los 3000 en binario, y además, claro está, todo esto en japonés también.
Los códigos QR se pueden utilizar para mostrar texto al modo de notas o avisos, para agregar una vCard (contacto de agenda electrónica) con el teléfono móvil, para abrir un uniform resource identifier (URI o identificador uniforme de recursos), etc.
Escaneamos el código. A este acto de la vinculación de los “objetos” se denomina hardlinking o hipervínculos objeto.
La imagen de la derecha, es un código QR normal. Vemos unos recuadros en los extremos marcados con un círculo amarillo, que son las marcas de posicionamiento, para que el escáner sitúe el resto de puntos; además, define las dos dimensiones. La marca que está en el circulo azul es la de alineamiento.
Existen otras marcas de control de errores y las propias de información, que no hemos marcado en la imagen. En la norma ISO 18004 está toda la información de las marcas de verificación y control.
Este código, como decíamos, es omnidireccional, se puede leer a alta velocidad con una rotación de 360º, esto es debido a las marcas de posición y a los patrones de detección.
Además, tiene la capacidad de corrección de errores, incluso si el símbolo está parcialmente sucio o dañado. Con un máximo del 30% de errores de código se puede restaurar el mensaje, existiendo diferentes niveles de calidad:
Capacidad de corrección de errores
Nivel L 7% de las palabras de código se pueden restaurar.
Nivel M 15% de las palabras de código se pueden restaurar.
Nivel Q 25% de palabras de código se pueden restaurar.
Nivel H 30% de las palabras de código se pueden restaurar.
Todo esto está muy bien. ¿Pero para qué sirve? ¿Cómo se usa? ¿Podemos generar códigos nosotros?
Bien, ésas son las preguntas que me hacen normalmente. Contestaré lo que pueda, ya que existe poca información en español, bastante en inglés y muchisima en japonés.
Sirve esencialmente para guardar información dentro de la misma etiqueta, desde texto plano hasta direcciones web, mensajes de correo-e, tarjetas de contactos de teléfonos e Internet y algunas cosas más que están incluso por descubrir.
Para poder usar estos códigos necesitamos esencialmente un escáner, pero con los teléfonos móviles que poseen cámara fotográfica también podemos escanear los códigos, así como con cualquier ordenador y una cámara web. A esto hay que añadir el software necesario.
Para los teléfonos con sistema operativo Android, desde el MARKET, podemos descargar gratuitamente el programa QR Droid, simplemente con la opción de búsqueda. También se puede descargar desde la web propia de QR Droid, http://qrdroid.com/es, en español, donde existe bastante información sobre su funcionamiento.
Desde el ordenador también podemos ir a Android Market en la dirección https://market.android.com/details?id=la.droid.qr&hl=es, y descargarlo en español. Existen información y enlaces hacia otros tipos de lectores de código QR, hay varias aplicaciones gratuitas y de pago.
Si queremos instalar un codificador/decodificador de códigos para nuestro ordenador con sistema operativo Windows, podemos utilizar el QuickMark es gratuito, y desde http://www.quickmark.com.tw/En/basic/downloadMain.asp se pueden descargar versiones para teléfonos móviles, y ordenadores con sistemas operativos diferentes. Si alguien tiene problemas de descarga, se lo podemos facilitar. Otro programa bastante utilizado para ordenador es el QRCode de Touch Up Soft, en ña dirección http://www.touchupsoft.com/xrenqrcode/, también es gratuito.
Volviendo a los códigos, hay varios tamaños (40), pero dependerá de la información que contenga: para mayor información, código más grande. No obstante, también influyen el tipo de papel o soporte de impresión, la calidad de la impresora y de escáner; pero generalmente, cuanto más información contenga el código, más grande debe ser:
Versión 1ª, 21x21 mm, 10-25 caracteres.
Versión 2ª, 25x25 mm, 20-47 caracteres.
Versión 3ª, 29x29 mm, 35-77 caracteres.
Versión 4ª, 33x33 mm, 67 a 114 caracteres.
Versión 10ª, 57x57 mm, 174-395 caracteres.
Versión 40ª, 177x177 mm, 1852-4296 caracteres.
Veamos ejemplos:
![]() |
![]() |
21x21mm URL Ars Creatio (25 caracteres) |
57x57 mm Dirección Ars Creatio (125 caracteres) |
Otra cuestión que tener en cuenta es la velocidad de lectura. Es muy rápida, pero dependerá esencialmente de la cantidad de caracteres que contenga el código. No hay que olvidar la resolución del tipo de cámara del móvil o escáner, el tamaño y la calidad de impresión, y por supuesto el deterioro; todo esto se puede ver en los dos ejemplos, el segundo tarda más en leerse que el primero.
Fíjense desde ahora en los periódicos de noticias españoles, en los anuncios, y ya verán como bastantes de ellos contienen nuestro código.