Revista Cultural Digital
ISSN: 1885-4524
Número 53 – Invierno 2019
Asociación Cultural Ars Creatio – Torrevieja

 

La Navidad del Poverello de Asís [1]

El cántico al sol (haiku)          

Resultado de imagen de san francisco de asis

 

El sol de enero

en la cruda vejez

del poverello.


Sol de febrero

sin la luz en los ojos

hondo silencio.


El sol de marzo

endulza el corazón

de San Francisco.


El sol de abril

el canto de los pájaros

miel en los labios.


El sol de mayo

acaricia las manos

del franciscano.


El sol de junio

por los hilos del monte

baja la noche.


El sol de julio

arriba en las montañas

aires en calma.


El sol de agosto

la luz del corazón

en su garganta.


Sol de septiembre

las cumbres enrojecen

cuando amanece.


El sol de octubre

le cubre con su manto

la hermana muerte.


Sol de noviembre

paz y bien y humildad

entre la gente.


Sol de diciembre

el Niño Dios de barro

en un pesebre.

 

Feliz 2019, aunque

no nos dejen.



[1] El Poverello de Asís

San Francisco en 1223 celebra la Navidad montando el primer belén de la historia con un niño Jesús de barro. Al año siguiente asiste por última vez al capítulo general de la orden que él mismo había fundado. Desengañado por los acuerdos tomados, decide retirarse al monte Alvernia a 160 kilómetros de Asís. Además de orar día y noche, le atormenta el futuro de los franciscanos. El espíritu de pobreza y libertad evangélicas estaba siendo puesto en entredicho. El 14 de septiembre de 1224 decide retirarse a un lugar aún más apartado arriba en la montaña. Deseaba más que nada en el mundo sufrir en su cuerpo los sufrimientos de Cristo en la cruz. Lo consigue. Ciego, envejecido, enfermo, regresa a la ciudad de Asís en 1225 y compone el Canto de las criaturas del que forma parte el Cántico al sol. San Francisco muere el 3 de octubre de 1226 con apenas 44 años de edad.